Venezuela tiene una nueva oportunidad para monetizar sus recursos energéticos, en particular el gas natural, pero no puede hacerlo por sí sola.
Según informó Hart Energy, Trinidad y Tobago está bajo presión ya que podría quedarse sin gas natural en menos de una década.
Ante esta situación, el país caribeño está buscando negociar con Venezuela para extraer gas del campo “Dragón”, lo que ha generado un revuelo en ambos gobiernos.
Además, están intentando lidiar con Estados Unidos para obtener la autorización y exportar gas desde Venezuela.
El presidente de Datanálisis, Luis Vicente León, señaló que el mecanismo más fácil para el Gobierno de Venezuela, y menos traumático en términos de sanciones, sería enviar el gas directamente a Trinidad a través de un gasoducto.
Afirmó que Venezuela podría perder el control operativo, pero la capacidad de maniobra para llevar el gas desde Venezuela y luego reenviarlo a Trinidad es mucho más compleja.
Cabe destacar que el ministro de Energía e Industrias Energéticas de Trinidad y Tobago, Stuart Young, se ha reunido con representantes de Venezuela y de Estados Unidos buscando solucionar el problema del gas en su país y evitar otros inconvenientes más graves.
León agregó que lo que probablemente hará Estados Unidos es realizar llamadas que no requerirán la firma de acuerdos de gas, ya que sin un acuerdo firmado, tendrían mayor capacidad de maniobra.
También señaló que esto estará en línea con la dolarización de Venezuela, una dolarización de facto. Habrá una flexibilización objetiva y no formal de la actividad petrolera.