La inflación acumulada ha devastado los bolsillos de los venezolanos, mientras que el dólar continúa en aumento. Según el Banco Central de Venezuela, el país ha experimentado una inflación del 121,3% entre enero y julio de 2023, superando las estimaciones realizadas por los expertos a principios de semana.
Los registros de inflación muestran que en junio fue del 6,2%, en mayo del 5,1%, en abril del 3,8%, en marzo del 6,1%, en febrero del 19,3% y en enero del 42,1%, que es la más alta en dos años.
El Banco Central de Venezuela también reveló que el aumento promedio de precios de bienes y servicios fue del 6,2%, igual que en junio.
Los sectores con mayores aumentos de precios fueron los servicios de vivienda (excepto teléfono), con un 10,5%, seguido de las comunicaciones, con un 8,1%; el esparcimiento y la cultura, con un 7,9%; la vestimenta y el calzado, con un 7,3%; y los restaurantes y hoteles, con un 7%.
Durante el mes de julio, el grupo de alimentos y bebidas no alcohólicas aumentó un 5,5%.
El Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF), una entidad no oficial, informó el pasado lunes que julio cerró con una inflación del 7,2%, 1,3 puntos menos que en junio, lo que representa una variación acumulada del 115% desde enero.
El economista José Guerra advirtió que las políticas económicas de Maduro son una “completa masacre” con graves consecuencias para los trabajadores, que recurren a la economía informal para cubrir sus gastos.
Por otro lado, los expertos aseguran que estamos presenciando una aceleración de la inflación en agosto debido al aumento del dólar en los primeros 11 días del mes, que se sitúa en un 6,45%, pasando de 29,61 bolívares a 31,52 bolívares por unidad.
En 2017, el país entró en hiperinflación y durante este período, el valor del bolívar, la moneda oficial, se redujo, proceso del que salió en diciembre de 2021.
Con información de EFE.