El líder político Pedro Briones, del partido izquierdista Revolución Ciudadana, fue asesinado este lunes por un disparo en Ecuador, según confirmaron algunos miembros del partido político.
“Luisa González, candidata presidencial correísta, expresó: ‘Ecuador vive su época más sangrienta. Esto se lo debemos al abandono total de un gobierno inepto y a un Estado tomado por las mafias’. González también envió sus condolencias a la familia de Pedro Briones, quien cayó en manos de la violencia. Según ella, el cambio es urgente”, afirmó.
La exasambleísta Paola Cabezas Castillo también señaló que Briones murió a causa de “una bala asesina que acabó con su vida”.
Hasta el momento, las autoridades no se han pronunciado sobre este nuevo incidente que enluta a Ecuador, a menos de una semana de las elecciones presidenciales.
Campaña ensombrecida por la violencia
La campaña electoral ha estado marcada por ataques e intercambio de acusaciones personales entre los candidatos, como ocurrió durante el debate presidencial organizado por el CNE para promover el voto informado.
Según el analista y consultor político Pedro Donoso, el asesinato del candidato Fernando Villavicencio ha dejado un panorama bastante complejo para las elecciones, que se celebrarán en seis días.
“Desde el lamentable asesinato del candidato Villavicencio, todo se ha trastocado. Ya no sabemos cuántos indecisos hay, no sabemos cómo está ahora el tablero electoral. Estamos en un proceso a oscuras”, opinó Donoso.
Según las encuestas de intención de voto realizadas antes del cierre público el 9 de agosto, tres empresas ubicaron a la candidata Luisa González, del Movimiento Revolución Ciudadana, como favorita en las preferencias. Detrás de González se destacan el exvicepresidente Otto Sonnenholzner y el candidato indígena de izquierda, Yaku Pérez.
Las encuestas también revelaron un alto nivel de indecisión que supera el 50%, por lo que el resultado de las elecciones es impredecible. Se espera un alto porcentaje de votos nulos y en blanco.
Ecuador irá a las urnas el 20 de agosto, después de que el mandatario Lasso aplicara de manera inédita la figura constitucional de “muerte cruzada” el 17 de mayo, disolviendo el Congreso y convocando a elecciones anticipadas en medio de una crisis política.