El nuevo salario mínimo de 460.000 pesos (540 dólares/500 euros) comenzó a regir este viernes en Chile y beneficiará a cerca de un millón de trabajadores.
“Este reajuste que estamos experimentando, que es de 440.000 a 460.000 pesos, es parte del camino para llegar a los 500.000 pesos” el próximo julio, dijo la ministra de Trabajo y Previsión Social, Jeannette Jara.
El Parlamento chileno aprobó el pasado mayo una ley que reajusta el salario mínimo hasta alcanzar, de forma gradual en tres tramos, los 500.000 pesos chilenos (585 dólares/544 euros) en julio de 2024.
La ley incluye además un subsidio a las micro, pequeñas y medianas empresas y determina una subida adicional si la inflación acumulada en 12 meses supera el 6%.
“Se concordó que en el caso que la inflación a finales de diciembre de este año supere el 6%, en enero de 2024 se van a anticipar 10.000 pesos en el camino para llegar a los 500.000 pesos”, apuntó Jara.
La medida, acordada por el Gobierno del progresista Gabriel Boric y la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), el principal sindicato del país, fue aprobada tras varias semanas de intensas negociaciones con la oposición y el empresariado por el monto del subsidio que recibirán las pymes para financiar el nuevo salario mínimo.
“Cuando el presidente Gabriel Boric se comprometió a que íbamos a hacer alzas del salario mínimo más sustantivas de lo que estábamos acostumbrados, también dijo de forma muy clara que esto iba a ser sin que se nos quedara ninguna Pyme atrás. Es subsidio inédito que nunca existió en Chile”, indicó por su parte el ministro de Economía, Nicolás Grau.
Es la segunda ley para subir el salario mínimo aprobada por el Ejecutivo chileno, después de un primer incremento del 14,3% en mayo de 2022, el mayor reajuste en 25 años.
Chile tiene uno de los salarios mínimos más altos de Latinoamérica, aunque todavía está muy lejos de los principales países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
EFE