Al menos trece personas perdieron la vida en un incendio que tuvo lugar la madrugada del domingo en Las Atalayas, una popular zona de ocio en la ciudad española de Murcia. En esta área se encuentran numerosas discotecas, locales de comida rápida y clubes nocturnos.
El fuego comenzó alrededor de las 6:00 am en una discoteca y rápidamente se propagó a otras dos, dejando atrapados a grupos de jóvenes que seguían de fiesta, incluidos varios amigos que celebraban un cumpleaños.
Hasta el momento, se ha localizado a una de las personas reportadas como desaparecidas horas después, según informó la Policía, pero se continúa la búsqueda de otras tres.
La mayoría de las víctimas mortales se encontraban en el local conocido como la Fonda Milagros, donde colapsó la primera planta y se desplomó, según los datos recopilados por los investigadores.
En un principio, los servicios de emergencia señalaron que el origen de la tragedia se encontraba en la discoteca Teatre, pero posteriormente la Policía informó que el fuego se había desatado en la Fonda y se había extendido hacia Teatre y otra discoteca llamada Golden, frecuentada por la comunidad latina.
En un principio, se habló de varias personas intoxicadas por el humo en la popular zona de bares y discotecas, pero una vez que las llamas fueron sofocadas, se encontraron los primeros cadáveres.
A lo largo del día, el número de víctimas mortales fue aumentando, y se instaló un equipo de psicólogos en el cercano Palacio de los Deportes para brindar apoyo a familiares y amigos de las víctimas. Entre ellos se encuentra el padre de una joven ecuatoriana de 28 años, quien envió a su madre un desgarrador mensaje de despedida.
Las naves incendiadas están siendo apuntaladas por los bomberos para garantizar la seguridad de los servicios de emergencia, lo cual podría llevar semanas, y se han comenzado a tomar muestras de ADN a los familiares para confirmar la identidad de los cuerpos encontrados. Hasta el momento, se han identificado a tres de los fallecidos mediante las huellas dactilares.
En cuanto a los heridos, cuatro personas han sido atendidas en hospitales por quemaduras e intoxicación por inhalación de humo, y otras 20 se dirigieron por su cuenta a centros sanitarios, pero todos han sido dados de alta.
Este incendio es el más mortífero registrado en España en un local de ocio desde la tragedia ocurrida en 1990 en la discoteca “Flying” de Zaragoza, donde fallecieron 43 personas. La mayor tragedia en una discoteca tuvo lugar en Madrid el 17 de diciembre de 1983, cuando un incendio originado tras las cortinas del escenario de la discoteca Alcalá 20 acabó con la vida de 81 personas, la mayoría jóvenes.