En Venezuela, las autoridades policiales han detenido a varias personas relacionadas con el tráfico de fentanilo, una sustancia que ha causado una grave crisis de opioides en Estados Unidos. El último decomiso tuvo lugar el 15 de octubre en el estado Portuguesa, donde se detuvo a Ernesto Pacheco, director del hospital universitario Dr. Miguel Oraá, por su presunta participación en el desvío de un lote de fentanilo.
Además, en Guanare, capital del estado Portuguesa, se privó de libertad a tres hombres y una mujer por tráfico de fentanilo. En septiembre, el gobernador del estado Táchira, Freddy Bernal, informó sobre la primera incautación de fentanilo por tráfico ilegal en Venezuela. Bernal advirtió sobre los peligros de esta droga y su potencial letalidad.
En otro caso, en el estado Vargas, se detuvo a Endy Manuel Rivero Marín por posesión de fentanilo y cocaína. Rivero Marín fue enviado a prisión y se le imputaron cargos por tráfico agravado de sustancias estupefacientes y psicotrópicas.
El fentanilo es una sustancia anestésica utilizada en procedimientos médicos y para el manejo del dolor agudo o crónico. Es alrededor de 100 veces más potente que la morfina y ha sido responsable de miles de muertes por sobredosis en Estados Unidos.
Los efectos del fentanilo incluyen la disminución de la conciencia, confusión, sedación, euforia intensa, náuseas y depresión cardiorrespiratoria. El consumo de fentanilo conlleva riesgos como la sobredosis, el deterioro cognitivo a largo plazo y el potencial abuso y consumo problemático.
El fentanilo fabricado ilegalmente también se conoce con otros nombres en Estados Unidos, y su presentación y potencia pueden variar en el mercado ilegal. Esto aumenta el riesgo de sobredosis y otros efectos adversos para los consumidores.
Para hacer frente a la llegada del fentanilo, es importante contar con programas de análisis de sustancias que permitan a la población conocer lo que realmente están consumiendo. Estos programas brindan información para tomar decisiones conscientes y evitar el consumo de sustancias peligrosas.
Es necesario estar preparados y alertas ante esta situación, pero evitar el pánico y el sensacionalismo que no contribuyen a encontrar soluciones. Con información de Échele Cabeza, una organización que busca generar conciencia sobre el consumo de sustancias psicoactivas y reducir los riesgos asociados a ellas.
En resumen, el tráfico de fentanilo en Venezuela ha llevado a la detención de varias personas. Esta sustancia altamente potente y peligrosa ha causado una crisis de opioides en Estados Unidos. Es importante contar con programas de análisis de sustancias para evitar su consumo y sus efectos perjudiciales.