El ministro brasileño de Minas y Energía, Alexandre Silveira, anunció que viajará a Caracas la próxima semana para negociar con las autoridades del Gobierno de Nicolás Maduro la reanudación inmediata de las importaciones de energía eléctrica de Venezuela. Estas importaciones fueron suspendidas durante el gobierno de Jair Bolsonaro.
Silveira también tiene planeado inspeccionar la central hidroeléctrica de Guri, ubicada en el río Caroní y que suministraba energía al estado brasileño de Roraima, así como la línea de transmisión que conecta a ambos países y que no ha sido utilizada en los últimos cinco años.
El ministro afirmó que espera regresar de Venezuela con una fecha definida para la reanudación de las importaciones. Si la línea de transmisión es segura y la producción de energía en Guri se encuentra en condiciones normales, estima que en aproximadamente 30 días la energía estará llegando a Boa Vista, la capital de Roraima.
Brasil necesita urgentemente la energía venezolana, ya que Roraima es el único estado del país que no está conectado al sistema de interconexión eléctrica nacional. Sin la energía venezolana, Roraima depende de generadores térmicos que utilizan diesel, lo cual es costoso y altamente contaminante.
En el pasado, Roraima recibía energía de Guri entre 2001 y 2019, pero el Gobierno de Bolsonaro suspendió las importaciones debido a los frecuentes apagones en Venezuela, los cuales ponían en riesgo la transmisión de energía.
Silveira destacó que la reanudación de las importaciones de energía venezolana está contemplada en un decreto presidencial sancionado en agosto, y que esto ha sido posible gracias a la normalización de las relaciones bilaterales desde que Lula asumió su tercer mandato en enero pasado.
En cuanto a los beneficios, además de garantizar el abastecimiento eléctrico de Roraima, la reanudación de las importaciones de energía venezolana generará un ahorro mensual de 10 millones de reales (aproximadamente 2 millones de dólares) para los consumidores brasileños, quienes actualmente pagan más caro por la energía generada por las termoeléctricas.
El ministro resaltó que la reanudación de las importaciones de electricidad venezolana no afectará los proyectos del país para integrar a Roraima en el sistema interconectado nacional, lo cual permitirá que el estado comience a recibir energía de otras regiones del país a partir de 2024.
Con información de efectococuyo.com