El 22 de octubre, la jornada electoral convocada por la oposición en Venezuela se vio obstaculizada por la censura contra los medios de comunicación, tanto convencionales como digitales. Esto dificultó la libre circulación de información sobre el proceso, sumado a los bloqueos de dominios de la Comisión Nacional de Primaria, apagones en varias regiones del país y caídas en la conectividad a internet.
Días antes de la votación, la Comisión Nacional de Telecomunicaciones de Venezuela (Conatel) solicitó a distintas emisoras de televisión, radio y otros medios que no cubrieran las primarias opositoras. Esto fue denunciado por el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP), la ONG Espacio Público y el Instituto de Prensa y Sociedad (Ipys). Carlos Correa, director de Espacio Público, explicó en una entrevista que a los medios se les pidió que no hicieran cobertura de las elecciones, argumentando que no estaban respaldadas por el Consejo Nacional Electoral (CNE).
Según reportes de Ipys, las principales emisoras, circuitos radiales y canales nacionales de al menos 13 estados del país decidieron no cubrir las primarias, a pesar de no haber sido contactados por Conatel.
Carlos Correa también señaló que en Venezuela hay cerca de un centenar de portales de noticias, y más de la mitad están bloqueados. Estos bloqueos obligaron a la gente a usar VPN y dificultaron la difusión de información durante la jornada electoral.
Espacio Público registró diez casos de violaciones a la libertad de expresión contra periodistas durante las elecciones primarias. Además, según un estudio de Ipys, en Venezuela hay 133 localidades denominadas “desiertos informativos”, lo que significa que sus habitantes no tienen acceso a la información. Esto afecta a aproximadamente siete millones de venezolanos que viven en zonas desinformadas.
Andrés Azpúrua, director de Venezuela Sin Filtro, confirmó que durante las primarias se mantuvo la censura en internet contra los sitios web de noticias. Sin embargo, la ciudadanía pudo informarse y superar la censura a través de plataformas como Whatsapp, Telegram y Twitter.
Además de la censura a los medios, se documentaron bloqueos a otros dominios relacionados con la primaria opositora, como la página de la Comisión y el dominio web del buscador oficial de los centros de votación. Estos bloqueos afectaron el acceso a información relevante para los ciudadanos.
Las interrupciones en el servicio de internet en distintas regiones del país también afectaron el proceso electoral. Venezuela Sin Filtro identificó dos momentos en los que cayó la conectividad de la red, incluyendo un apagón en una parte de Caracas que podría haber incidido en el servicio de Cantv, proveedor de internet en el país.
En resumen, la jornada electoral en Venezuela se vio afectada por la censura contra los medios de comunicación, bloqueos de dominios y interrupciones en el servicio de internet. Esto dificultó la libre circulación de información y generó desconfianza en el proceso electoral.