El ejército israelí ha anunciado el inicio de una “operación precisa y selectiva” contra Hamás en el interior del hospital Al Shifa, el centro médico más grande de la franja de Gaza. El hospital alberga a cientos de pacientes en situación crítica y también sirve de refugio para miles de personas. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han declarado que la operación se basa en información de inteligencia y una necesidad operativa.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha expresado su profunda preocupación por los pacientes hospitalizados en Al Shifa. Testigos han relatado que las fuerzas de seguridad israelíes han utilizado botes de humo y han pedido a todos los hombres entre 16 y 40 años que se congreguen en el patio del hospital. La OMS ha perdido contacto con el personal sanitario del hospital y teme por la seguridad de los pacientes.
Israel ha asegurado que sus fuerzas incluyen equipos médicos y hablantes de árabe, que han recibido un entrenamiento específico para este entorno complejo y sensible. El objetivo es evitar dañar a los civiles que Hamás utiliza como escudos humanos. También han solicitado la rendición de todos los terroristas de Hamás presentes en el hospital. Las FDI informaron previamente a las autoridades de Gaza que debían cesar toda actividad militar dentro del hospital, pero no se ha cumplido.
Hamás ha negado haber utilizado el hospital para sus operaciones y ha pedido la intervención de un comité internacional para inspeccionar el lugar. En un comunicado, ha calificado las acciones de las fuerzas israelíes como “crímenes de guerra”, “crímenes morales” y “crímenes contra la humanidad”. Israel ha atacado un centro civil, no instalaciones militares, según Hamás.
Testigos han informado que el ejército israelí ha ingresado al hospital Al Shifa habitación por habitación, planta por planta, interrogando al personal y a los pacientes. Los civiles refugiados en el centro médico han sido reunidos en el patio y sometidos a controles de seguridad. El ejército israelí tiene un “control absoluto” y no se han reportado enfrentamientos armados.
El Ministerio de Salud de Gaza ha recibido una advertencia por parte de Israel sobre el ataque al complejo hospitalario de Al Shifa. La Organización Mundial de la Salud ha alertado sobre la rápida deterioración de la situación en el hospital y se ha informado sobre la existencia de una fosa común donde se habrían enterrado hasta 200 cadáveres. La falta de electricidad ha provocado el fallo de equipos médicos vitales, impidiendo el tratamiento adecuado de decenas de bebés prematuros y 45 pacientes renales que requieren diálisis.
Estados Unidos ha condenado el ataque al hospital y ha expresado su preocupación por la seguridad de los civiles y los pacientes. El presidente Biden ha pedido la protección de los hospitales y los pacientes. Además, el presidente estadounidense y el primer ministro israelí han mantenido una conversación telefónica para discutir los esfuerzos para liberar a los rehenes retenidos por Hamás.
La incursión en el hospital Al Shifa se produce después de que Estados Unidos respaldara las afirmaciones de Israel de que Hamás había construido un centro de mando subterráneo bajo el hospital. Hamás ha responsabilizado a Estados Unidos y a Israel por el ataque, afirmando que los comentarios de la inteligencia estadounidense han dado luz verde a Israel.
El personal del hospital ha afirmado que es imposible salir sin correr el riesgo de sufrir lesiones o morir. La OMS ha advertido que la situación en el hospital se está deteriorando rápidamente debido a los constantes disparos y bombardeos en la zona. No hay suficiente comida ni combustible para los generadores, y los cadáveres no pueden ser atendidos ni enterrados adecuadamente.
En resumen, el ejército israelí ha llevado a cabo una operación en el hospital Al Shifa en la franja de Gaza, lo que ha generado preocupación por la seguridad de los pacientes y el personal médico. Israel afirma que busca evitar dañar a los civiles utilizados como escudos humanos por Hamás, mientras que Hamás niega haber utilizado el hospital para sus operaciones. La falta de electricidad y los constantes bombardeos han llevado a una situación crítica en el hospital. Estados Unidos ha condenado el ataque y ha solicitado la protección de los hospitales y los pacientes.
Con información de efectococuyo.com