El técnico del Chelsea, Mauricio Pochettino, se enfrenta a un récord indeseable esta temporada en la Premier League: su equipo es el que ha recibido más tarjetas amarillas hasta ahora. Sin embargo, Pochettino ha salido en defensa de sus jugadores y ha asegurado que esto no refleja falta de disciplina, sino más bien un deseo de competir.
“Somos un club grande y eso conlleva presión”, afirmó Pochettino antes del próximo partido del Chelsea contra el Crystal Palace. “Cuando te sientes frustrado y quizás no tienes la misma experiencia que otros equipos, cometes errores”.
En el último partido contra el Wolverhampton, que terminó con una derrota de 2-1, el equipo sumó cinco tarjetas amarillas. Entre los amonestados se encuentra Cole Palmer, quien se perderá el próximo partido debido a haber acumulado cinco tarjetas en esta temporada. Según Pochettino, esto es comprensible, ya que Palmer está disputando su primera temporada como titular y está motivado por ganar, lo que puede llevar a la frustración.
El Chelsea ya ha tenido jugadores suspendidos al inicio de la temporada por expulsiones, como Reece James, Malo Gusto y Conor Gallagher. Además, Nicolas Jackson, quien se unió al equipo este verano, está a solo dos tarjetas amarillas de llegar a las diez, lo que resultaría en una suspensión de dos partidos después de su primera sanción en septiembre.
Pochettino también destacó las lesiones como un factor que ha contribuido a los problemas del equipo, con al menos ocho jugadores fuera de forma para el próximo partido contra el Crystal Palace en Stamford Bridge.
En resumen, Pochettino defiende la alta cantidad de tarjetas amarillas recibidas por el Chelsea esta temporada como resultado del deseo de competir y la falta de experiencia en algunos jugadores. Además, destaca las lesiones como un factor que ha afectado negativamente al equipo.