Tres periodistas perdieron la vida este domingo 7 de enero en la Franja de Gaza como resultado de un ataque israelí. Uno de ellos fue Hamza al Dahdouh, hijo del jefe de la corresponsalía de la televisión catarí Al Jazeera en el enclave palestino, Wael al Dahdouh, quien ha sufrido la pérdida de gran parte de su familia debido a los bombardeos de Israel.
Hamza al Dahdouh y Mustafa Thuraya fallecieron cuando el automóvil en el que se encontraban fue atacado durante una cobertura periodística en Rafah, al sur de la Franja de Gaza, según confirmó el Gobierno de Gaza. Por otro lado, el reportero gráfico Ali Salem Abu Ajwa perdió la vida en un bombardeo aéreo en la ciudad de Gaza, al norte del enclave costero.
El Gobierno de Gaza, controlado por el grupo islamista Hamás, condenó estas muertes y denunció los ataques a periodistas como un intento fallido de Israel por ocultar la verdad. En un comunicado, instaron a los sindicatos de prensa, medios de comunicación y organizaciones de derechos humanos a condenar este crimen y denunciar su repetición por parte de la ocupación israelí.
Por su parte, Hamás acusó a Israel de asesinar deliberadamente a los dos periodistas que se encontraban juntos, catalogándolo como un “crimen de guerra” con el objetivo de “amedrentar” a los periodistas y hacer que dejen de informar desde Gaza.
Según las autoridades de Gaza, con estas muertes el número de periodistas fallecidos durante la guerra en la Franja de Gaza asciende a 110, incluyendo a influyentes e intelectuales. Sin embargo, el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ), una organización no gubernamental, afirma que son 77 los reporteros fallecidos, además de 16 heridos, tres desaparecidos y 21 detenidos durante la cobertura de esta guerra.
Wael al Dahdouh, padre de Hamza, resultó herido en un ataque de un dron israelí pocos días después de la muerte de su hijo, mientras cubría el bombardeo de una escuela de la ONU en Jan Yunis, al sur de Gaza. En las redes sociales circulan videos y fotografías que muestran al periodista llorando la muerte de su hijo Hamza junto a su cuerpo sin vida.
La guerra entre Israel y el grupo Hamás comenzó el pasado 7 de octubre, después de un masivo ataque del grupo islamista que incluyó el lanzamiento de cohetes y la infiltración simultánea de miles de milicianos que causaron la muerte de alrededor de 1.200 personas y secuestraron a otras 250 en poblaciones cercanas a Gaza. Desde entonces, el Ejército de Israel ha llevado a cabo una fuerte ofensiva aérea, terrestre y marítima en la Franja de Gaza, donde ya se han registrado más de 22.800 muertos y 58.400 heridos. La zona se encuentra en medio de una crisis humanitaria sin precedentes, con el colapso de los hospitales, brotes de epidemias y escasez de agua potable, alimentos, medicinas y electricidad.
Fuente: EFE
Con información de efectococuyo.com