El Papa Francisco hizo un llamado a la comunidad internacional para que haya un mayor compromiso con el derecho humanitario, en un momento en el que los conflictos no distinguen entre objetivos militares y civiles, y afectan indiscriminadamente a la población civil. Durante su discurso ante el cuerpo diplomático acreditado ante la Santa Sede, el Papa señaló que Ucrania y Gaza son ejemplos claros de esta situación y afirmó que las violaciones graves del derecho internacional humanitario son crímenes de guerra que deben prevenirse.
El Pontífice también hizo un llamado a una política de desarme mundial y al diálogo como alma de la comunidad internacional. Asimismo, destacó la importancia de evitar las colonizaciones y polarizaciones ideológicas. En su intervención, el Papa abordó la situación en Gaza y Ucrania, instando a un alto el fuego y al inicio de negociaciones. En el caso de Gaza, pidió la liberación de todos los rehenes y la protección necesaria para la población palestina en términos de ayuda humanitaria, hospitales, escuelas y lugares de culto.
El Papa Francisco expresó su confianza en que la comunidad internacional promueva una solución de dos Estados, uno israelí y uno palestino, con un estatuto especial internacionalmente garantizado para la Ciudad de Jerusalén. También mencionó la guerra en Gaza y su impacto en la región, así como la situación en Siria y Líbano.
En cuanto a la guerra entre Rusia y Ucrania, el Papa destacó la necesidad de poner fin a la tragedia a través de negociaciones y respetando el derecho internacional. También instó a Armenia y Azerbaiyán a firmar un tratado de paz para solucionar la dramática situación humanitaria en el Cáucaso meridional y facilitar el regreso de los desplazados a sus hogares de forma legal y segura.
El Papa Francisco mencionó el sufrimiento de millones de personas en África debido a múltiples crisis humanitarias causadas por el terrorismo internacional, problemas sociopolíticos y los efectos devastadores del cambio climático. También se refirió a la situación en Sudán, Camerún, Mozambique, República Democrática del Congo y Sudán del Sur.
En relación al continente americano, el Papa señaló que aunque no hay guerras abiertas, existen fuertes tensiones entre algunos países, como Venezuela y Guyana, y fenómenos de polarización en otros, como Perú, que socavan la armonía social y debilitan las instituciones democráticas. El Papa expresó su preocupación por la situación en Nicaragua y llamó a un diálogo diplomático respetuoso en beneficio de los católicos y de toda la población.
En resumen, el Papa Francisco hizo un llamado a la comunidad internacional para que se comprometa más con el derecho humanitario y para que se busquen soluciones pacíficas a los conflictos en Ucrania, Gaza y otras regiones afectadas. También instó a la prevención de las violaciones graves del derecho internacional humanitario y destacó la importancia del desarme mundial y el diálogo como elementos fundamentales para la paz.
Con información de efectococuyo.com