El ocaso económico de La ciudad de Juan Griego: Un pueblo fantasma en la Isla de Margarita, estado Nueva Esparta.
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La decadencia de Juan Griego Isla de Margarita
La ciudad de Juan Griego solía ser conocida por sus hermosos atardeceres y su próspera zona comercial, pero en la actualidad más del 90 % de los establecimientos del puerto libre se encuentran cerrados de forma definitiva.
Desolación en las calles de Juan Griego Isla de Margarita
Caminar por las calles de Juan Griego es presenciar cuadras enteras de locales clausurados, muchos de los cuales muestran letreros de venta.
La desolación es evidente, y los comerciantes, aunque temerosos de hablar abiertamente sobre la crisis que enfrentan, aseguran en el anonimato que los altos impuestos municipales han llevado a la segunda ciudad comercial de Margarita a su ocaso definitivo.
Impacto de los altos impuestos
“La principal razón por la que la calle La Marina, la arteria comercial de la ciudad, se encuentra desierta, es la ley de tributos que tenemos.
No es amigable con el contribuyente y no busca conciliar las deudas.
Los impuestos son los más altos a nivel regional y el acoso fiscal es constante”, expresó un comerciante bajo condición de anonimato.
Presión Fiscal y Cierre de Negocios
El comerciante explicó que tienen hasta el día 15 de cada mes para declarar sus impuestos, y si no lo hacen en ese plazo, los fiscales del municipio Marcano acuden directamente con un punto de venta para exigir el pago de la deuda.
Ante esta presión fiscal, muchos comerciantes se ven obligados a cerrar sus negocios.
Impacto en el Comercio Local
En la calle La Marina, frente a la playa de Juan Griego, se encuentra un minicentro comercial llamado “Caño Mánamo”, donde de 31 pequeños locales, solamente 6 están activos.
Los comerciantes denuncian que, además de los altos impuestos municipales, deben hacer frente a elevadas facturas de electricidad y agua, a pesar de no recibir un servicio adecuado.
La situación es tal que una perfumería con 40 años de historia en la principal calle comercial se ve obligada a liquidar sus existencias y cerrar sus puertas.
El propietario, que prefirió mantenerse en el anonimato, lamenta la ausencia de clientes y señala que incluso los turistas extranjeros que visitan la isla no realizan compras significativas.
A pesar de este panorama desolador, algunos establecimientos han logrado reactivarse cambiando su giro hacia la venta de alimentos, atrayendo a residentes locales que realizan compras utilizando bonos a través del Sistema Patria.
El municipio Marcano, bajo la gestión del alcalde chavista Yul Armas, en lugar de fomentar el desarrollo económico, ha provocado la quiebra de numerosos comerciantes con impuestos inasumibles en medio de una recesión económica.
Los resultados son evidentes: Juan Griego se ha convertido en un cementerio de locales cerrados, un pueblo fantasma devastado por la voracidad del chavismo.