La falta de información sobre el proyecto de santuario de mamiferos acuáticos hacia sectores que hacen vida en el sector La Caranta, despertó el alerta de posible daño ambiental.
Pescadores, ambientalistas y otros expertos en la materia advierten que la iniciativa está planteada en el mayor caladero de sardina de Margarita y dónde se encuentra el principal banco de corales, por lo que una construcción de cualquier tipo en el lugar afectaría una riqueza natural ancestral.
Ante los medios detallaron todos los inconvenientes del proyecto enmarcado en el modelo de zona económica especial, insistiendo en su firme posición de oponerse a ideas desarrollistas depredadoras.
El cronista de Pampatar, Marino Luna, rechazó que el propio Ministerio de Ecosocialismo apoye un proyecto que pone en riesgo el ambiente.
Considera que este espacio, más allá de resguardar especies, seguirá siendo un lugar para mantener a los delfines en cautiverio y como animales de circo.
También, Andrés Vicente Marcano, pescador artesanal de Pampatar, dijo que la presencia permanente de delfines en la zona, puede alejar a las sardinas por el sonido que estos emiten.
“Están totalmente equivocados. No es viable para el turismo, menos para el pamptarense y el pescador».
Recordó que las comunidades más necesitadas de Margarita viven de la pesca y no del turismo, como quieren hacer creer.
«Afectaría a todos los treneros, tanto de Pampatar, Moreno, Valdez, Bella Vista, la Isleta y seguiría para Coche. Entonces sería hambre para el pueblo de Pampatar y para toda Nueva Esparta”, afirmó.