Tragedia en Madrid: 20 años del atentado del 11-M
En la madrugada del 11 de marzo de 2004, cuatro trenes en Madrid fueron blanco de explosiones que sacudieron a la ciudad durante la hora punta matinal. La escena de cadáveres en las vías y la atención médica a los heridos conmocionó a España, dejando 192 muertos y cerca de 2,000 heridos.
Los atentados, obra de yihadistas inspirados por al Qaeda, marcaron un antes y un después en la historia europea del siglo XXI, demostrando la capacidad del integrismo islámico para sembrar terror en Occidente menos de tres años después del 11-S.
El 11-M se convirtió en el ataque más sangriento en Europa hasta la fecha, generando una crisis política y social en España. La gestión de la autoría, con acusaciones a ETA desmentidas por la investigación, dejó heridas aún abiertas en la sociedad española.
En el ámbito internacional, el atentado puso de manifiesto la importancia de la cooperación antiterrorista, especialmente con países del norte de África, donde la mayoría de los implicados en el 11-M tenían vínculos.
El impacto del 11-M también se reflejó en la lucha global contra el terrorismo, desplazando a al Qaeda como referente principal del yihadismo en Europa en favor de Estado Islámico, cuya propaganda y reclutamiento han marcado una nueva era en el extremismo islámico.
A pesar de los avances en la lucha antiterrorista, la amenaza sigue latente en la actualidad, con posibles reactivaciones ligadas a conflictos internacionales como el de Gaza. La incertidumbre sobre futuros ataques mantiene en alerta a las autoridades europeas, conscientes de la volatilidad de la ideología yihadista.
Con información de efectococuyo.com