La ciudad de Cúcuta, ubicada en el principal paso fronterizo con Venezuela, se encuentra en alerta naranja debido a la contaminación atmosférica, lo que ha llevado a las autoridades a implementar medidas como el uso obligatorio de mascarillas y la suspensión de clases.
En un puesto de mando unificado (PMU), con la participación de autoridades locales y nacionales, se declaró la emergencia de alerta amarilla en la red pública de salud para garantizar una atención oportuna a los ciudadanos que puedan verse afectados por enfermedades respiratorias.
En las últimas dos semanas, Cúcuta ha estado cubierta por una densa capa blanca en el cielo, fenómeno atribuido a la inversión térmica, condición que impide la dispersión de contaminantes y genera acumulaciones en el aire.
El alcalde de Cúcuta, Jorge Acevedo, se reunió con su homólogo de San Cristóbal, en Venezuela, para coordinar acciones y abordar los problemas comunes en la región binacional, incluyendo la crisis de contaminación ambiental.
Acevedo afirmó: “Hemos establecido un equipo para abordar de manera integral el problema de la calidad del aire en Cúcuta y contribuir a su mejora”.
Entre las medidas implementadas se encuentra la reducción al 50 % de la capacidad de operación de industrias que utilicen calderas, como tintorerías, lavanderías, curtiembres y fundidoras.