El gobierno de Venezuela rechazó de manera contundente la intromisión de Estados Unidos en la industria petrolera del país, calificando la imposición de sanciones y licencias como una forma de tutelaje, control y manipulación. Esta postura se dio a conocer a través de un comunicado emitido por la Cancillería venezolana.
La declaración surge como respuesta a la decisión de Estados Unidos de revertir parcialmente las medidas de alivio de sanciones sobre el petróleo y el gas de Venezuela, las cuales habían sido implementadas en octubre pasado y expiraron a las 0:01 hora local de este jueves, tras seis meses de flexibilización.
El Departamento de Estado de EE.UU. argumentó que Venezuela no ha cumplido totalmente con el Acuerdo de Barbados, firmado en octubre de 2023 entre representantes del gobierno de Nicolás Maduro y la oposición, en preparación para las elecciones presidenciales del 28 de julio próximo.
En ese acuerdo, el chavismo y la coalición opositora Plataforma Unitaria Democrática (PUD) acordaron garantías electorales para las presidenciales, pero la inscripción de la candidatura de la historiadora Corina Yoris, propuesta por la líder opositora María Corina Machado, enfrentó obstáculos que Estados Unidos consideró como una violación al pacto.
La Cancillería venezolana expresó su pesar por la decisión de Estados Unidos, señalando que esta afecta cualquier posibilidad de normalización de las relaciones bilaterales. Asimismo, reafirmó que, con o sin licencias, Venezuela está decidida a mantener su soberanía como nación, en concordancia con las declaraciones de Maduro realizadas el día anterior.