La líder depuesta Aung San Suu Kyi trasladada a un nuevo lugar de arresto
La junta militar birmana ha anunciado el traslado de Aung San Suu Kyi, la líder depuesta, de la prisión en la capital del país a otro lugar de arresto con “mejores condiciones”, aunque no se ha revelado la ubicación exacta.
El portavoz de la junta, Zaw Min Tun, confirmó que Suu Kyi, de 78 años y con problemas de salud, fue trasladada a un lugar diferente fuera del penal, pero aclaró que no se encuentra bajo arresto domiciliario.
Este traslado se ha realizado temporalmente debido a las altas temperaturas en el país, según indicó el portavoz, sin ofrecer más detalles al respecto.
Además de Suu Kyi, la junta también trasladó al presidente depuesto Win Myint, de 72 años, a un lugar no precisado por las mismas razones.
Win Myint, quien fue presidente entre 2018 y 2021, fue detenido el día del golpe militar y cumple una condena de ocho años de cárcel, tras una reducción de una sentencia inicial de 12 años.
Amnistía a 3.300 presos
Este traslado coincide con la amnistía concedida a unos 3.300 prisioneros, incluidos algunos presos políticos de bajo perfil, anunciada por la junta militar con motivo de la celebración del Año Nuevo budista.
Suu Kyi, quien ocupaba el cargo de consejera de Estado y era la líder de facto del país desde 2016, fue juzgada por los militares en un proceso largo y opaco, criticado por diversos organismos internacionales.
En enero pasado, Suu Kyi afirmó en una carta enviada a su hijo que se encuentra bien en general, aunque con problemas de salud. Actualmente, cumple una condena de 27 años, reducida a 33 años, por cargos presentados por la junta militar que ella niega.
La política birmana ya pasó 15 años bajo arresto domiciliario en su residencia en Rangún, durante el periodo de mandato de la anterior junta militar (1962-2011), tras liderar desde 1988 el movimiento prodemocrático contra los militares, lo que le hizo ganar el premio Nobel de la Paz en 1991.
Icónica vivienda
En enero pasado, el Tribunal Supremo, controlado por la junta militar, ordenó la subasta de la icónica vivienda de Suu Kyi en Rangún, donde estuvo bajo arresto domiciliario. Sin embargo, la subasta fue cancelada a finales de marzo debido a la ausencia de pujas por la propiedad.
Birmania (Myanmar) se encuentra sumida en una espiral de violencia desde el golpe, que ha intensificado el conflicto de guerrillas en el país. Más de 4.800 personas han muerto en manos de las fuerzas de seguridad birmanas y más de 20.000 se encuentran detenidas desde el levantamiento militar, según la Asociación para la Asistencia de Prisioneros Políticos de Birmania (AAPP).
Con información de efectococuyo.com