El jefe de gobierno español evalúa dimitir tras denuncias a su esposa.
En un giro inesperado de los acontecimientos, el Presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ha decidido poner una pausa a su agenda oficial. Este miércoles, Sánchez anunció que se tomará un tiempo para reflexionar sobre la continuidad de su administración, en medio de las denuncias presentadas contra su esposa, Begoña Gómez.
El anuncio de Sánchez llega después de que un juzgado de Madrid iniciara diligencias previas contra Gómez. La investigación se centra en las relaciones de Gómez con empresas que recibieron fondos y firmaron contratos públicos con la administración dirigida por Sánchez. La denuncia fue presentada por la organización ultraderechista Manos Limpias, que se autodenomina sindicato, aunque no se le conoce ninguna acción sindical.
Sánchez, en una carta pública compartida en su cuenta de X (antes Twitter), expresó su profundo amor por su esposa y su impotencia ante las acusaciones. “Este ataque no tiene precedentes, es tan grave y tan burdo que necesito parar y reflexionar con mi esposa”, escribió.
Sánchez justificó su decisión de comunicarse con los españoles a través de una carta, dada la gravedad de los ataques que él y su esposa han recibido. Aseguró que la denuncia de Manos Limpias se basa en “supuestas informaciones” difundidas por medios de comunicación de ultraderecha, las cuales han sido desmentidas.
El Presidente español ve tanto la denuncia como la reacción de los líderes de la oposición como parte de una “operación de acoso y derribo”. Sánchez se encuentra en un momento de reflexión, preguntándose si debe continuar al frente del Gobierno o renunciar a su cargo. La respuesta a esta incógnita se dará el próximo 29 de mayo, en una comparecencia ante los medios de comunicación.