El aire acondicionado es un dispositivo que se utiliza durante todo el año, ya que puede proporcionar tanto aire frío como caliente. Sin embargo, su uso es más frecuente en verano, cuando necesitamos mantenernos frescos. A pesar de sus beneficios, es importante tener en cuenta que también puede representar un riesgo para nuestra salud.
Expertos advierten que cualquier aire acondicionado puede convertirse en un reservorio de partículas dañinas si no se realiza un mantenimiento adecuado. Si el electrodoméstico no se limpia regularmente, puede expulsar aire contaminado y provocar problemas como alergias y dificultades respiratorias. Por lo tanto, la limpieza del dispositivo es esencial para prevenir estos riesgos.
¿Cómo limpiar el aire acondicionado sin gastar dinero?
Para llevar a cabo una limpieza efectiva, es importante seguir estos pasos y evitar el uso de jabones líquidos como los utilizados para lavar platos:
1. Desconectar el equipo y asegurarse de que no haya corriente eléctrica.
2. Quitar la tapa frontal del aire acondicionado.
3. Localizar los filtros de aire, retirarlos y lavarlos con agua tibia y jabón neutro. Se puede utilizar un cepillo suave con cuidado para no dañarlos.
4. Secar los filtros al aire libre antes de volver a colocarlos en el dispositivo.
5. Limpiar las rejillas de ventilación con un paño de microfibra húmedo y jabón.
¿Cuáles son los riesgos de tener el aire acondicionado sucio?
La falta de mantenimiento del aire acondicionado puede poner en riesgo nuestra salud, ya que la calidad del aire que respiramos depende en gran medida de la limpieza del dispositivo. El polvo y el polen acumulados en los filtros y conductos pueden ser liberados al ambiente si no se realiza una limpieza adecuada.
Un estudio realizado en la Facultad de Ciencias e Ingeniería de Flinders University mostró que los filtros del aire acondicionado pueden retener gotas de saliva que emitimos constantemente al respirar, hablar y toser. En caso de no poder realizar una limpieza completa del dispositivo, se recomienda ventilar adecuadamente las habitaciones. Además, es importante tener en cuenta que un aire acondicionado sucio consume más energía, lo que se reflejará en la factura de electricidad.