La adolescencia es una etapa crucial en la vida de las personas, marcada por importantes cambios tanto a nivel social como biológico. Durante este período, que abarca desde los 12 hasta los 21 años, se producen transformaciones metabólicas y hormonales fundamentales para el desarrollo. Sin embargo, muchos adolescentes enfrentan problemas relacionados con el sueño que pueden impactar negativamente en su bienestar.
El doctor Javier Albares enfatiza que los adolescentes suelen dormir menos de lo recomendado, lo cual se debe a horarios perjudiciales, malos hábitos y la falta de valoración histórica del sueño en la sociedad. Establecer rutinas saludables es crucial para permitir que los jóvenes descansen adecuadamente y puedan desarrollarse de manera óptima.
Problemas de sueño comunes en adolescentes
Según el doctor Albares, reducir el uso de dispositivos móviles, especialmente antes de dormir, puede ser clave para garantizar un sueño reparador. Limitar el tiempo de exposición a pantallas y evitar utilizar estos dispositivos antes de acostarse puede mejorar la calidad del sueño nocturno. Es preocupante que muchos adolescentes utilicen sus celulares en la cama, lo que afecta negativamente su capacidad para conciliar el sueño.
Establecer hábitos saludables, como cenar a horas fijas y realizar actividades relajantes antes de acostarse, puede contribuir significativamente a mejorar la calidad del sueño. Consumir alimentos procesados y comida chatarra durante la adolescencia también puede interferir con el descanso, por lo que es recomendable optar por alternativas más saludables para promover un sueño reparador.
La práctica regular de ejercicio físico en adolescentes no solo favorece la salud física, sino que también contribuye a un mejor descanso nocturno. El deporte ayuda a liberar energía acumulada, facilitando la conciliación del sueño y reduciendo el estrés y la ansiedad. Promover hábitos alimenticios saludables y la actividad física en los jóvenes puede mejorar significativamente su calidad de vida y bienestar.