El Senado de Argentina se encuentra inmerso en un intenso debate sobre el paquete de reformas económicas propuesto por el Gobierno de Javier Milei. La sesión, que se lleva a cabo con un final abierto, ha estado marcada por episodios violentos a las puertas del Parlamento, donde diversos sectores se manifiestan en contra de las iniciativas.
El debate en el pleno de la Cámara Alta inició a las 10.15 hora local y se espera que se extienda hasta la medianoche, momento en el que se someterán a votación el proyecto de ley ‘Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos’, también conocida como ‘ley ómnibus’ o ‘ley de Bases’, y la reforma fiscal impulsada por el Gobierno.
El desafío para la formación gobernante de ultraderecha La Libertad Avanza es significativo, dado que es minoritaria en el Parlamento. Con una división equitativa entre los 72 miembros del Senado, la votación se presenta reñida, y aún existen dudas sobre la posición final de algunos senadores. El Gobierno podría realizar modificaciones adicionales en los proyectos para intentar sumar más apoyos.
En caso de empate, la titular del Senado y vicepresidenta argentina, Victoria Villarruel, será la encargada de desempatar, a menos que deba ceder ese rol a otro senador si el presidente Milei se encuentra en un viaje a Europa y ella asume temporalmente la Presidencia del país.
El futuro político del Ejecutivo en los próximos meses dependerá en gran medida del resultado de esta votación, ya que la ‘ley de Bases’ y el plan de ‘shock’ fiscal son fundamentales en el programa de Gobierno de Milei.
La ‘ley de Bases’ ha transitado un complejo proceso parlamentario durante casi medio año. El oficialismo, en minoría, tuvo que realizar varios ajustes al proyecto original para lograr su aprobación en la Cámara de Diputados a finales de abril. Ahora, de ser aprobada en el Senado, deberá regresar a Diputados para su discusión.
Esta iniciativa declara la emergencia pública en diferentes áreas y otorga facultades delegadas al Ejecutivo. Contempla la reforma del Estado, la privatización de empresas, cambios en la legislación laboral y de jubilación, así como incentivos para el sector energético y de hidrocarburos, y las grandes inversiones.
Paralelamente, se debate un paquete fiscal que incluye un blanqueo de capitales y una moratoria impositiva y aduanera, entre otros aspectos.
El paquete legislativo ha sido objeto de fuertes críticas por parte de algunos sectores de la oposición política, el movimiento sindical y organizaciones sociales, que se manifestaron este miércoles en las inmediaciones del Congreso. Los enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas de seguridad han derivado en actos violentos, incluyendo vandalismo y detenciones.
En este contexto, el resultado de la votación en el Senado será determinante para el rumbo político y económico del país en los próximos meses.
Con información de efectococuyo.com