El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha destacado este lunes su compromiso con la paz al promover el diálogo y el entendimiento en Venezuela, junto con sus pares de Colombia y México. Esta declaración se produjo tras las controversiales elecciones presidenciales de la semana pasada.
En una reunión con su homólogo chileno, Gabriel Boric, desde el palacio de La Moneda, Lula da Silva enfatizó que el respeto por la soberanía popular lo motiva a defender la transparencia y abogar por la paz a través del diálogo entre Gobierno y oposición en Venezuela.
Esta es la primera declaración pública de Lula da Silva respecto a Venezuela, luego de que los Gobiernos de Brasil, México y Colombia intensificaran sus esfuerzos diplomáticos para abordar la crisis en el país. Estos países solicitaron a las autoridades electorales venezolanas la publicación expedita de los datos desglosados por mesa de votación.
Brasil, México y Colombia instaron a resolver las controversias electorales de forma institucional y a garantizar la verificación imparcial de los resultados, basándose en el principio de soberanía popular. Estos países, liderados por mandatarios progresistas, se mantienen firmes en su llamado a la transparencia en el proceso electoral.
Por su parte, la oposición y parte de la comunidad internacional han expresado sospechas de fraude por parte del Gobierno chavista en las elecciones presidenciales. Algunos países, como Estados Unidos, Argentina, Uruguay y Perú, han reconocido al exdiplomático opositor Edmundo González Urrutia como ganador.
La Unión Europea también ha cuestionado los resultados publicados y ha exigido pruebas que respalden la victoria proclamada, sin reconocer oficialmente al exdiplomático como presidente electo. En este escenario, el presidente chileno, Gabriel Boric, ha sido uno de los primeros líderes internacionales en pedir transparencia en la publicación de resultados.
Tras la proclamación de Nicolás Maduro como presidente, se desataron protestas en Caracas y otras ciudades, con reportes de 11 civiles muertos y más de 2.000 detenidos, según organizaciones de derechos humanos.
Con información de efectococuyo.com