Ataque ruso a convoy de la Cruz Roja en Ucrania deja tres muertos.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, informó este jueves que un bombardeo ruso en el este de Ucrania ha dejado tres muertos en un convoy humanitario del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR). El ataque, que también dejó dos heridos, fue catalogado por Zelensky como «otro crimen de guerra ruso». Las víctimas formaban parte de una misión que distribuía ayuda en la región de Donetsk.
Las fotografías compartidas por medios internacionales muestran uno de los vehículos en llamas, identificado con los signos visibles de la Cruz Roja. El CICR condenó enérgicamente el ataque, y su presidenta, Mirjana Spoljaric, expresó su dolor por la pérdida de los empleados, calificando el hecho como inconcebible.
Zelensky pidió una respuesta contundente de la comunidad internacional ante este ataque y reiteró que «Rusia trae el mal, Ucrania protege la vida». También criticó a quienes intentan justificar las acciones rusas bajo un falso equilibrio entre ambas partes.
Putin advierte a la OTAN sobre misiles de largo alcance
En medio de la creciente tensión, el presidente ruso, Vladímir Putin, lanzó una advertencia directa a la OTAN. En una declaración reciente, afirmó que si la organización autoriza a Ucrania el uso de misiles de largo alcance para golpear territorio ruso, esto significaría que la OTAN y sus aliados estarían directamente involucrados en la guerra.
«Si esa decisión se toma no significará otra cosa que la participación directa de los países de la OTAN, de EE. UU. y de los países europeos, en la guerra en Ucrania», declaró Putin en una entrevista para la televisión pública rusa tras un foro en San Petersburgo.