El Ministro de Interior y Justicia, Diosdado Cabello, anunció el sábado el decomiso de más de 400 armas de fuego en Venezuela. Según Cabello, estas armas iban a ser utilizadas en presuntos actos conspirativos contra el Gobierno de Nicolás Maduro.
En una conferencia de prensa, Cabello reveló que los más de 400 fusiles de diferentes calibres fueron incautados por los organismos de seguridad del Estado en varios operativos realizados en distintas ubicaciones de Venezuela. El armamento, proveniente de los Estados Unidos, fue detectado y confiscado antes de que pudiera ser utilizado para fines ilícitos.
Cabello destacó que esta cantidad significativa de armamento es solo una muestra de lo decomisado en operaciones de inteligencia en el país. Varias personas han sido detenidas en relación con este caso, y se ha identificado a grupos vinculados a la ultraderecha como receptores de estas armas.
Entre los detenidos se encuentran ciudadanos estadounidenses, un checo y dos españoles, parte de un grupo de 14 personas acusadas de planear acciones terroristas en Venezuela. Los detenidos son señalados de intentar desestabilizar el país y de tener vínculos con agencias de inteligencia extranjeras.
El ministro también informó que las armas llegaron a Venezuela camufladas en contenedores con productos diversos, y que grupos locales se encargaban de armarlas una vez en el país. Además, señaló a un exfuncionario de seguridad de Caracas como uno de los cabecillas de esta red de tráfico de armas, implicando a líderes opositores en el plan.
Cabello denunció la participación de agencias de inteligencia de Estados Unidos y España en la captación de mercenarios para llevar a cabo acciones violentas en Venezuela. Se mencionó un presunto plan para asesinar a la alcaldesa de Upata, estado Bolívar, y se vinculó a figuras políticas opositoras con la trama.