La reconocida líder opositora María Corina Machado expresó su gratitud por el respaldo brindado por el Parlamento Europeo, el cual aprobó una resolución no vinculante en la que reconoce a Edmundo González Urrutia como el presidente legítimo y electo de Venezuela.
Mediante su cuenta en la red social Twitter, la política compartió un mensaje que decía: “Gracias Europa”, acompañado de una imagen de la Eurocámara durante la votación a favor de González Urrutia, quien es un diplomático de carrera.
Además, el Parlamento Europeo también reconoció a Machado como la líder de las fuerzas democráticas en Venezuela, un respaldo que se suma al otorgado por algunos gobiernos de América Latina, Estados Unidos, el Congreso de Diputados y el Senado español, así como tres expresidentes de dicho país (Felipe González, Mariano Rajoy y José María Aznar).
La votación, respaldada por el Partido Popular Europeo, los ultraconservadores y la extrema derecha, denunció el fraude electoral tras la proclamación de la victoria de Nicolás Maduro por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE), decisión avalada posteriormente por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
En un comunicado de prensa emitido por la Eurocámara, se destaca que la resolución también insta a la Corte Penal Internacional a incluir las violaciones de los derechos humanos y las detenciones arbitrarias en curso en sus investigaciones sobre los posibles crímenes contra la humanidad cometidos por el régimen de Maduro, exigiendo así que los responsables rindan cuentas.
Por otro lado, Machado y González Urrutia sostuvieron un encuentro virtual con los presidentes de Guatemala, Paraguay y Uruguay, Bernardo Arévalo, Santiago Peña y Luis Lacalle Pou respectivamente. Durante la reunión, la dirigente agradeció la oportunidad de alinear posturas en pro de la libertad y la democracia en Venezuela, reiterando que González Urrutia es el presidente electo del país y enfatizando la importancia de hacer valer la Soberanía Popular expresada en las elecciones del 28 de julio, así como de exigir que el régimen rinda cuentas por las violaciones a los derechos humanos y los crímenes de lesa humanidad.