Para muchas personas, conciliar el sueño cada noche puede ser todo un desafío. La calidad del descanso es fundamental para nuestra salud, y un factor que a menudo pasamos por alto es la influencia del color de la luz en nuestra habitación. La iluminación adecuada puede contribuir a crear un ambiente más relajante que favorezca un sueño reparador. Por lo tanto, prestar atención al tipo de luz que utilizamos en nuestro espacio puede marcar la diferencia en la calidad de nuestro descanso.
En caso de sufrir de insomnio, existen alternativas naturales que pueden ser de gran ayuda, como la melatonina. Cada vez más popular es el uso de la luz roja, la cual se ha demostrado que mejora la calidad del sueño. La premisa es sencilla: al exponernos a la luz roja antes de dormir, nuestro cuerpo se prepara para el descanso, lo que puede resultar en un sueño más profundo y reparador.
El doctor Álex Ferré, especialista en medicina del sueño y miembro de Grupo Top Doctors, destaca la importancia de crear un ambiente tranquilo para facilitar un descanso adecuado. En un entorno saturado de ruidos y luces, es esencial encontrar maneras de generar un ambiente relajante en nuestra habitación. Las luces rojas han ganado popularidad por su capacidad para preparar el cuerpo para un sueño reparador.
Además, el doctor Ferré señala que no solo las luces rojas son beneficiosas para conciliar el sueño, sino que cualquier tono de luz que no sea verde o azul puede contribuir a mantener un sueño de calidad. Las luces amarillas, naranjas y rojas no interfieren en la producción de melatonina, lo que las convierte en una excelente opción. Por su parte, el doctor Estivill afirma que la luz roja es ideal para estimular la producción de melatonina, indicando al cerebro que es hora de descansar y prepararse para la noche.
Por lo tanto, optar por luces cálidas en nuestra habitación puede ser una elección acertada para mejorar la calidad del sueño. Los especialistas aseguran que no es necesario adquirir bombillas rojas específicamente, ya que las amarillas o naranjas también pueden ser eficaces. El doctor Estivill recomienda comenzar a utilizar este tipo de iluminación a partir de las siete de la tarde, adaptándose al horario de sueño de cada persona. Esto permite que la melatonina se libere a tiempo para preparar al cuerpo para el descanso nocturno.
Cabe destacar que la luz roja recomendada para favorecer el sueño no debe confundirse con la utilizada en terapias musculares, la cual es popular entre deportistas. El doctor Guillermo Rodríguez aclara que, si bien esta terapia ha existido durante mucho tiempo, en la actualidad cuenta con tecnología más avanzada. A diferencia de la luz roja utilizada para dormir, la terapia muscular emplea luz infrarroja que genera calor y puede contribuir a la recuperación de lesiones en la piel.