Tras ser nominado por el presidente Donald Trump como el próximo secretario de Estado de los Estados Unidos, el senador de Florida, Marco Rubio, expresó su compromiso de desempeñar su labor de la mejor manera posible y agradeció la consideración del presidente electo al seleccionarlo para su gabinete ejecutivo.
«Dirigir el Departamento de Estado de Estados Unidos es una enorme responsabilidad, y me siento honrado por la confianza que el presidente Trump ha depositado en mí. Como secretario de Estado, trabajaré todos los días para llevar a cabo su agenda de política exterior», afirmó Rubio a través de sus redes sociales.
El senador estadounidense de origen cubano destacó que durante su gestión, junto con la presidencia de Trump, se alcanzarán todos los objetivos de Estados Unidos desde el Departamento de Estado y que desempeñará un papel crucial como uno de los principales colaboradores del nuevo mandatario.
“Bajo el liderazgo del presidente Trump, lograremos la paz a través de la fuerza y siempre pondremos los intereses de los estadounidenses y de los Estados Unidos por encima de todo”, agregó Rubio.
Rubio, de 53 años y senador por Florida, marcará un hito al convertirse en el primer latino en ocupar este puesto, lo que representa un gran logro para el político que ha aspirado a la Casa Blanca durante años. Nacido en Miami y descendiente de inmigrantes cubanos, Rubio cuenta con una trayectoria política de 25 años en la que ha adquirido un profundo conocimiento de los entresijos del ámbito político.