La policía española ha llevado a cabo un importante golpe al narcotráfico al interceptar un pesquero de bandera venezolana en aguas al oeste de las Islas Canarias, descubriendo en su interior un cargamento de 3.300 kilos de cocaína. Los diez tripulantes, compuestos por nueve venezolanos y un colombiano, fueron arrestados en una operación conjunta con la Agencia Tributaria española.
Esta operación internacional fue coordinada entre la Policía Nacional española, la DEA de Estados Unidos, la Policía Judiciária de Portugal y la Policía Federal de Brasil. Se logró incautar un total de 110 fardos de cocaína, cada uno con un peso aproximado de 30 kilos, según informó la agencia Efe.
Gracias a la cooperación policial internacional y a una alerta emitida por la DEA a mediados de noviembre, se inició una investigación sobre una organización criminal que planeaba transportar una gran cantidad de cocaína a través del Atlántico. El pesquero interceptado, con bandera venezolana, se sospecha que había zarpado desde alguna costa sudamericana con rumbo a España.
Tras recibir la alerta, las autoridades abordaron el pesquero para evitar la distribución de la droga en territorio español y garantizar su captura. El 29 de noviembre, el Buque de Operaciones Especiales «Petrel» de Vigilancia Aduanera detectó la embarcación en cuestión navegando sin luces en dirección a España, confirmando que se trataba del pesquero buscado. Tras la interceptación, se descubrió que la tripulación estaba arrojando por la popa bultos compatibles con los utilizados para el transporte de droga.
Los detenidos y la droga incautada fueron trasladados al puerto de Las Palmas de Gran Canaria, en las islas españolas de Canarias. Esta operación es solo una muestra de la lucha constante de las autoridades contra el narcotráfico internacional.