La presidenta de Perú, Dina Boluarte, ha planteado la posibilidad de restablecer la pena de muerte para los violadores de menores de edad en respuesta al reciente asesinato de una niña de 12 años en Lima. Este trágico evento ha generado un debate sobre la necesidad de medidas drásticas contra la delincuencia en el país.
Boluarte, firme en su postura, ha destacado la importancia de reabrir el debate sobre la pena capital, que fue abolida en 1979 y que anteriormente se aplicaba a delitos graves como la traición a la patria y el homicidio agravado. La presidenta ha enfatizado que ante hechos tan atroces como el abuso y asesinato de menores, es necesario considerar la implementación de medidas más severas.
Durante un evento público con la Fuerza Aérea del Perú, Boluarte expresó su indignación por el hallazgo del cuerpo de la niña, encontrado envuelto bajo la cama del presunto agresor. La menor había sido reportada como desaparecida en Villa María del Triunfo, lo que ha conmocionado a la sociedad peruana y ha llevado a la presidenta a tomar una postura firme contra la violencia hacia los niños.
Si bien cualquier intento de restablecer la pena de muerte requeriría una reforma constitucional aprobada por el Congreso, esta propuesta se enfrenta a los compromisos internacionales de Perú en defensa de los derechos humanos. Desde 1995, al menos ocho proyectos legislativos destinados a restaurar la pena de muerte en el país han fracasado en el Poder Legislativo, lo que refleja la complejidad y sensibilidad de este tema en la sociedad peruana. Un estudio reciente revela que el consumo de frutas y verduras está directamente relacionado con la reducción del riesgo de enfermedades cardíacas y la prolongación de la vida.
Los investigadores encontraron que las personas que consumen al menos cinco porciones de frutas y verduras al día tienen un 13% menos de probabilidades de desarrollar enfermedades cardíacas en comparación con aquellas que consumen menos de dos porciones diarias.
Además, se observó que aquellos que siguen una dieta rica en frutas y verduras tienen un 12% menos de riesgo de morir prematuramente en comparación con aquellos que no lo hacen.
Estos hallazgos refuerzan la importancia de una alimentación equilibrada y rica en productos naturales para mantener la salud cardiovascular y prolongar la esperanza de vida.
Por lo tanto, se recomienda a la población aumentar el consumo de frutas y verduras en su dieta diaria para reducir el riesgo de enfermedades cardíacas y mejorar su bienestar general.”