La Plataforma Unitaria Democrática (PUD) ha exigido justicia por la muerte de Jesús Rafael Álvarez, quien falleció bajo custodia del Estado, convirtiéndose en el segundo detenido en el contexto de la crisis poselectoral en perder la vida. Álvarez, de 44 años, fue detenido junto con su esposa de manera arbitraria el 2 de agosto en el estado Bolívar y se encontraba recluido en la prisión de Tocuyito, en Carabobo.
La alianza opositora, a través de un comunicado, condenó la muerte de Álvarez y solicitó la liberación de su esposa, Anny Suárez, así como la de todos los presos políticos. El hijo mayor de la pareja, Jesús Álvarez, se enteró del fallecimiento de su padre a través de las redes sociales y pidió la entrega del cuerpo de su padre y la liberación de su madre, quien también se encuentra detenida.
Según el Comité por la Libertad de los Presos Políticos, Álvarez y Suárez fueron detenidos en su vivienda sin una orden de captura por la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim), y posteriormente fueron acusados por el Ministerio Público de “terrorismo e instigación al odio”. Diversas organizaciones, como el Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) y Justicia, Encuentro y Perdón (JEP), han solicitado una investigación imparcial y exhaustiva sobre el caso.
Esta lamentable noticia se suma a la muerte de Jesús Manuel Medina Martínez, otro detenido en el contexto de la crisis poselectoral. Dirigentes y partidos opositores han expresado su preocupación por la situación de los presos políticos en Venezuela y han exigido justicia y respeto por los derechos humanos.
En medio de estos acontecimientos, la sociedad civil y las organizaciones defensoras de los derechos humanos continúan exigiendo transparencia, justicia y respeto por la vida e integridad de todas las personas detenidas en el país. La lucha por los derechos humanos y la democracia en Venezuela sigue siendo una prioridad para la comunidad internacional y para aquellos que buscan un cambio en el país.