La justicia francesa ha impuesto una condena de 20 años de prisión a Dominique Pelicot por los delitos de drogar, violar y permitir que otros 50 hombres abusaran sexualmente de su entonces esposa, Gisèle Pelicot, mientras esta se encontraba inconsciente. Pelicot, de 72 años, fue acusado de drogar a su esposa con somníferos y ansiolíticos para cometer estos actos durante una década, entre 2011 y 2020, junto a otros cómplices reclutados a través de internet.
Durante el juicio en Aviñón, el presidente del tribunal, Roger Arata, declaró a Pelicot culpable de violación con agravantes. Los 51 hombres juzgados en este caso también fueron declarados culpables, con penas que oscilan entre 3 y 15 años de prisión. Uno de los cómplices, Jean-Pierre Marechal, admitió seguir los pasos de Pelicot y fue condenado a 12 años de prisión, menos de los 17 años que pedía la fiscalía francesa.
Gisèle Pelicot, la víctima en este caso, decidió renunciar al anonimato y permitir que el público asistiera al juicio como una forma de concienciar sobre el uso de drogas y las agresiones sexuales. En sus declaraciones a los medios, afirmó su confianza en que la sociedad pueda avanzar hacia un futuro en el que hombres y mujeres vivan en armonía y respeto mutuo. La BBC reconoció a Gisèle Pelicot como una de las 100 mujeres inspiradoras e influyentes a nivel mundial en 2024, como parte de su lista anual de “BBC 100 Mujeres”.
Este caso ha generado un gran impacto en Francia y en la comunidad internacional, destacando la importancia de abordar y condenar la violencia de género y los delitos sexuales. La valentía de Gisèle Pelicot al enfrentar públicamente a su agresor y al sistema judicial ha sido elogiada como un ejemplo de resiliencia y empoderamiento para otras víctimas de violencia.