El partido Voluntad Popular ha anunciado su respaldo a la extensión de funciones de la Asamblea Nacional de Venezuela electa en 2015 hasta el período 2025-2026. Según el comunicado emitido por el partido naranja, esta medida busca garantizar una Asamblea Nacional legítima que respete la voluntad de cambio expresada por los venezolanos en las urnas el pasado 28 de julio, donde Edmundo González Urrutia fue elegido como el próximo presidente. Esta elección parlamentaria es reconocida como la última libre en Venezuela tanto por los ciudadanos como por la comunidad internacional.
Voluntad Popular ha calificado a la Asamblea Nacional de 2020 como “írrita”, argumentando que fue creada a medida de Nicolás Maduro y es ilegal debido a su origen fraudulento y su funcionamiento al servicio de la dictadura. Por lo tanto, el partido se niega a legitimar a esta AN dirigida por Maduro y que intentará juramentarlo ilegalmente el próximo 10 de enero. Consideran que avalar este fraude sería reconocer una situación ilegítima tanto dentro como fuera de Venezuela.
Además, Voluntad Popular ha expresado su respaldo al diputado Marco Aurelio Quiñones, quien fue juramentado como nuevo segundo vicepresidente del Parlamento de 2015 en sustitución de Auristela Vásquez, quien renunció por motivos personales. Con estas decisiones, el partido opositor busca fortalecer la legitimidad de la Asamblea Nacional y rechaza cualquier intento de validar una institución que consideran ilegítima.
En resumen, Voluntad Popular ha tomado una postura firme en defensa de la democracia en Venezuela, respaldando la extensión de funciones de la Asamblea Nacional de 2015 y rechazando la legitimidad de la Asamblea de 2020. Su compromiso con el respeto a la voluntad de los venezolanos y la lucha contra la dictadura de Maduro se refleja en sus acciones y declaraciones recientes.