El senador Marco Rubio, nominado como secretario de Estado de Estados Unidos por Donald Trump, expresó su postura sobre la situación en Venezuela durante su audiencia de confirmación en el Senado en Washington. En sus declaraciones, Rubio no escatimó en críticas hacia el gobierno de Nicolás Maduro, al afirmar que el país está siendo controlado por organizaciones narcotraficantes que se han apoderado del Estado.
En relación a los intentos de diálogo entre Estados Unidos y la administración de Maduro para lograr elecciones libres en Venezuela, Rubio cuestionó el papel de Joe Biden y Kamala Harris, argumentando que fueron engañados por el chavismo. Según Rubio, las negociaciones con Maduro resultaron en elecciones falsas que no cumplieron con las expectativas.
A pesar de las sanciones económicas impuestas por Estados Unidos a Venezuela, la Casa Blanca ha encontrado formas de mantener relaciones comerciales con el país, especialmente en el sector del petróleo. Rubio mostró su desaprobación hacia las licencias especiales que permiten a empresas como Chevron realizar transacciones con el gobierno de Maduro, generando beneficios económicos para el oficialismo.
Además, Rubio alertó sobre la presencia de Rusia e Irán en Venezuela, señalando la construcción de fábricas de drones iraníes en el país. También denunció presuntas prácticas ilegales de la administración de Maduro al proporcionar pasaportes a miembros de Hezbolá. Estas declaraciones de Rubio resaltan la preocupación por la influencia extranjera y las actividades ilegales en Venezuela.