La UE destinaría 113 millones de euros para apoyar a Latinoamérica

La Unión Europea (UE) anunció hoy un presupuesto humanitario inicial de 113 millones de euros destinado a Latinoamérica y el Caribe, así como cerca de 1.900 millones de euros para asistencia global.

Según la comisaria de Gestión de Crisis, Hadja Lahbib, la UE reafirma su compromiso de apoyar a más de 300 millones de personas que necesitan ayuda humanitaria en 2025, manteniéndose como el principal donante de ayuda humanitaria. Esta financiación apoyará a socios en el terreno, como el sistema de las Naciones Unidas, la Cruz Roja/Media Luna Roja, gobiernos internacionales y locales, y organizaciones no gubernamentales, para proporcionar ayuda de emergencia y salvar vidas cuando sea necesario. Asimismo, se enfatiza la importancia del acceso seguro y sin trabas a las personas necesitadas, instando a todas las partes a respetar el Derecho Internacional Humanitario.

Los 113 millones de euros se destinarán principalmente a abordar la crisis humanitaria en Venezuela a nivel nacional y regional, así como a brindar apoyo a Colombia por conflictos armados, crisis en Haití, y la creciente violencia en Centroamérica, México y Ecuador. En Oriente Medio, se asignarán 375 millones de euros para situaciones como Gaza y los recientes eventos en torno a la caída del presidente sirio Bachar al Asad, mientras que el Norte de África y Yemen recibirán 95 millones de euros.

Además, la UE tiene previsto asignar 510 millones de euros a África para apoyar a las personas más vulnerables en regiones como África Occidental y Central, el Sahel, la cuenca del lago Chad, el noroeste de Nigeria, África Central, la región de los Grandes Lagos y el Cuerno de África. Otros destinos de ayuda incluyen 182 millones de euros a Asia, con foco en la crisis de Myanmar y su impacto en Bangladesh, así como la crisis en Afganistán; 35 millones de euros a la región de África Austral y el océano Índico; 5 millones de euros al sur del Cáucaso y Asia Central; 140 millones de euros para Ucrania, que se encuentra en su tercer año de guerra con Rusia, y 8 millones de euros para proyectos humanitarios en Moldavia. Además, se reservan 295 millones de euros para responder a emergencias repentinas y crisis imprevistas, y 110 millones de euros para actividades horizontales, incluyendo proyectos innovadores e iniciativas políticas.