Nicolás Maduro, en su tercer mandato como presidente de Venezuela tras una controvertida reelección, expresó su objetivo de aumentar la producción de petróleo del país a 1.5 millones de barriles diarios, con recursos propios. Durante un evento televisado, Maduro informó que la industria petrolera ya ha alcanzado un promedio de 1.057.000 barriles diarios en enero y se encamina hacia la meta de 1.5 millones.
Además, destacó que la industria del gas se está recuperando después de un incidente en noviembre que afectó al mayor distribuidor de gas en el estado de Monagas. Maduro señaló que, a pesar de este contratiempo, la producción de gas para consumo interno y exportación se espera que crezca significativamente este año, aunque no ofreció cifras específicas.
Según la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), Venezuela produjo en promedio 921.000 barriles diarios de crudo el año pasado, un aumento del 17.6% en comparación con el año anterior. En diciembre, la producción casi alcanzó el millón de barriles diarios, con un promedio de 998.000 bpd, lo que representa un crecimiento del 5.2% respecto al trimestre anterior.
A pesar de las expectativas optimistas, la producción de petróleo en Venezuela aún está lejos de los niveles alcanzados a principios de siglo, cuando el país bombeaba alrededor de 2.89 millones de barriles diarios. A finales de 2023, el exministro de Petróleo Pedro Tellechea pronosticó que la producción superaría el millón en 2024, una meta que no se logró a pesar del levantamiento parcial de las sanciones estadounidenses.
La industria petrolera venezolana enfrenta desafíos significativos, pero el gobierno de Maduro continúa trabajando en aumentar la producción y exportación de petróleo y gas para impulsar la economía del país. A pesar de los obstáculos, Venezuela sigue siendo un actor clave en el mercado energético global.