Las autoridades de Estados Unidos han llevado a cabo la detención de 538 inmigrantes criminales sin documentos y la deportación de cientos de ellos en una operación contra la inmigración irregular impulsada por el presidente Donald Trump tras asumir su cargo el pasado lunes. La Agencia de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE) informó que se realizaron 538 arrestos y se presentaron 373 órdenes de detención en el marco de esta operación.
El informe diario de ICE sobre el cumplimiento de las órdenes de Trump en materia de inmigración incluye varios ejemplos de delincuentes capturados en las redadas, los cuales han sido publicados por la Casa Blanca en sus redes sociales. Entre los casos mencionados se encuentra el de Luis Alberto Espinoza-Boconsaca, detenido en Buffalo el 23 de enero y condenado por violación, así como el de Cristofer Alexander Ramírez Olivia, detenido el mismo día en St. Paul y condenado por conducta criminal sexual con un menor.
La Casa Blanca ha destacado este trabajo como parte de los esfuerzos de la Administración Trump para fortalecer la seguridad en las fronteras del país. Además, se ha mencionado que esta es la operación de deportación masiva más grande en la historia, cumpliendo con las promesas hechas durante la campaña.
Trump, quien gobernó entre 2017 y 2021, ha hecho de la lucha contra la inmigración ilegal uno de sus principales puntos de enfoque. Desde el inicio de su mandato, ha firmado decretos para incrementar las deportaciones y cerrar la frontera con México. Recientemente, se ha desplegado a unos 1.500 militares en la frontera con México, con un aumento del 60% en el número de fuerzas activas desde que Trump asumió el cargo.
El Pentágono también ha anunciado el apoyo en transporte aéreo militar para los vuelos de deportación de más de 5.000 extranjeros ilegales detenidos en San Diego, California, y El Paso, Texas, por Aduanas y Protección Fronteriza. Esta medida forma parte de las acciones implementadas para reforzar el control de la inmigración irregular en el país.