En Tapachula, México, cientos de migrantes, principalmente de Venezuela, Cuba y países de Centroamérica, se aglomeraron frente a las oficinas de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) en busca de asilo. Estas acciones responden a las nuevas medidas implementadas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que dificultan su avance hacia ese país.
La situación en la Comar se tornó caótica este lunes, con empujones y gritos que requirieron la intervención de la Guardia Nacional con equipos antidisturbios. Los migrantes expresaron su deseo de permanecer en México debido a las políticas de Trump, como deportaciones masivas y el endurecimiento de los requisitos para solicitar asilo.
Una de las migrantes, Jaqueline Alfonso, manifestó su intención de quedarse en México, pero expresó su frustración por la falta de respuesta por parte de la Comar. Esta situación se da en un contexto de disminución en las solicitudes de asilo en México en 2024, tras un récord en 2023.
El Gobierno mexicano ha prometido asistencia humanitaria a los migrantes, pero ha advertido que no otorgará asilo a aquellos que busquen utilizarlo como trampolín para llegar a Estados Unidos. Ante las dificultades en los trámites, los migrantes, como el ecuatoriano Kevin, piden una mejora en el sistema para evitar largas esperas y situaciones de caos.
En medio de esta tensa situación, un elemento de la Guardia Nacional informó a los migrantes que los trámites del día habían concluido y les pidió retirarse para regresar al día siguiente. Algunos migrantes se resistieron, generando tensiones en la zona de la Comar. La incertidumbre y la necesidad de respuestas concretas marcan la realidad de estos migrantes en busca de asilo en México.