El reconocido cineasta Quentin Tarantino ha expresado su visión pesimista sobre el estado actual de la industria cinematográfica. En una declaración contundente, Tarantino afirmó que el cine se encuentra en un punto de decadencia irreversible, atribuyendo parte de esta situación al auge de las plataformas de streaming en detrimento de las salas de cine tradicionales.
No es la primera vez que Tarantino critica el modelo de negocio del streaming en defensa de las salas de cine. Otros cineastas de renombre como Christopher Nolan, Steven Spielberg y Denis Villeneuve también han manifestado su descontento con las plataformas, aunque cabe destacar que existen defensores autorales como David Fincher que respaldan este nuevo formato de distribución.
La postura de Tarantino cobra relevancia en un momento crucial de su carrera, tras haber pausado indefinidamente la producción de su décima y supuesta última película como director, titulada «The Movie Critic». Alejado cada vez más de la industria, el cineasta reflexiona sobre la larga decadencia del modelo de negocios cinematográfico y cómo las plataformas digitales han transformado las dinámicas de retribución y reconocimiento para los creadores.
Durante su participación en el Festival de Cine de Sundance, Tarantino cuestionó el concepto actual de película, señalando la rapidez con la que los estrenos en cines son relegados a plataformas de streaming en cuestión de semanas. Su crítica se centró en la pérdida de valor y exclusividad que solían tener las proyecciones en salas de cine, ahora eclipsadas por la inmediatez y accesibilidad de los servicios de streaming.
En un panorama donde la rentabilidad y las estadísticas prevalecen sobre la calidad artística, Tarantino advierte sobre el peligro de perder la esencia y la magia del cine como forma de arte. Sus palabras reflejan una preocupación genuina por el futuro de la industria cinematográfica y la necesidad de preservar la experiencia única que solo el cine en pantalla grande puede ofrecer.