La secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, informó que un segundo vuelo con pandilleros venezolanos aterrizó en la base de Guantánamo, en Cuba, el pasado jueves 6 de febrero. Noem señaló que todos los individuos que llegaron en este vuelo son conocidos pandilleros venezolanos, responsables de delitos como homicidio, robo agravado, tráfico de armas, distribución de drogas, entre otros.
Este segundo vuelo de criminales extranjeros fue enviado a Guantánamo como parte de la decisión del gobierno de Donald Trump de utilizar esta base militar para albergar a inmigrantes con antecedentes penales. El presidente Trump anunció esta medida el 29 de enero, afirmando que Guantánamo tendría capacidad para detener hasta 30 mil inmigrantes. Los primeros detenidos, miembros de la banda criminal venezolana «El Tren de Aragua», llegaron el 5 de febrero.
Según la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, la detención de estos individuos en Guantánamo será temporal, hasta que puedan ser transportados a su país de origen u otro destino apropiado. A pesar de las tensiones entre Estados Unidos y Venezuela, el enviado especial de Trump para Venezuela y Corea del Norte se reunió con el líder chavista en Miraflores el pasado 31 de enero, donde se discutió la posibilidad de deportar a inmigrantes venezolanos.
La política migratoria de Trump incluye deportaciones masivas, la eliminación del TPS para venezolanos y otras medidas restrictivas. La decisión de enviar a pandilleros venezolanos a Guantánamo ha generado controversia y críticas por parte de grupos defensores de los derechos humanos. La administración Trump continúa implementando medidas para controlar la inmigración y combatir la entrada ilegal de personas a Estados Unidos.