La policía peruana llevó a cabo un importante operativo que resultó en el rescate de 123 mujeres, incluidas tres menores de edad, que estaban siendo explotadas sexualmente por una facción de la banda criminal venezolana Tren de Aragua. Este operativo, realizado por cientos de agentes policiales en diversas localidades de Lima, resultó en la detención de 23 presuntos miembros de esta organización.
Tras la intervención, se logró el rescate de las víctimas, destacando que tres de ellas eran menores de edad y las restantes eran mayores. De acuerdo con la policía, todas las personas rescatadas eran mujeres. Los detenidos formaban parte de una facción del Tren de Aragua conocida como Los Hijos de Dios, la cual opera en Perú desde el año 2021.
Este no es el primer golpe que se le da al Tren de Aragua en Perú. En enero de 2024, la policía rescató a 40 niñas y adolescentes que estaban siendo explotadas sexualmente a través de las redes sociales por la misma organización criminal.
En otro evento reciente, un megaoperativo policial respaldado por Estados Unidos culminó con la captura de 20 integrantes de la banda transnacional Tren de Aragua y la liberación de 84 víctimas, incluidas dos menores de edad. La operación contó con el apoyo de la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional de Inmigración y Aduanas (HSI Lima).
El operativo, que se llevó a cabo en los distritos de Santa Anita, San Martín de Porres y Puente Piedra, permitió la captura de 20 individuos y el rescate de 84 víctimas, dos de las cuales eran menores de edad. Además, se identificaron ocho ubicaciones relacionadas con una red sospechosa de trata de personas que involucraba a alrededor de 50 víctimas menores de edad.
El Tren de Aragua, originario de Venezuela en 2014, ha expandido sus actividades a varios países sudamericanos, incluyendo Colombia, Perú y Chile. Sus actividades incluyen trata de personas, asesinatos, secuestros, robos y extorsión. Este reciente operativo es parte de los esfuerzos continuos para desmantelar esta organización criminal y proteger a las víctimas de su explotación.