El presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), Elvis Amoroso, anunció un cambio en la fecha de las elecciones regionales y parlamentarias, pasando del 27 de abril al 25 de mayo. Esta modificación se realizó a solicitud de los factores políticos participantes, según lo expresado por Amoroso en una breve alocución.
Sin embargo, a pesar de este cambio, el CNE ha omitido nuevamente la publicación del cronograma electoral en Gaceta, lo que ha generado incertidumbre sobre las actividades reprogramadas y los plazos vencidos para etapas como la inscripción y la actualización del Registro Electoral.
Expertos electorales han señalado que otorgar 28 días adicionales para la organización de las elecciones no subsana las irregularidades cometidas por las autoridades del CNE, como la falta de transparencia en la publicación de información clave. Celiz Mendoza, exconsultor jurídico del CNE, ha enfatizado la necesidad de que cualquier cambio en la fecha de las elecciones sea retroactivo para garantizar la equidad del proceso.
Por otro lado, se ha destacado la falta de plazos adecuados para la participación ciudadana, especialmente en lo referente a la inscripción y actualización del Registro Electoral. La opacidad en la organización del proceso electoral ha generado críticas por parte de expertos y analistas políticos, quienes consideran que el CNE actúa de manera arbitraria al no justificar sus decisiones.
En cuanto a las reacciones de los factores políticos, se ha observado una división de opiniones. María Corina Machado ha expresado que el chavismo ya está derrotado y ha llamado a luchar por la recuperación de la democracia. Por su parte, Diosdado Cabello ha señalado que el diferimiento de las elecciones podría aumentar la división en la oposición. La Plataforma Unitaria Democrática ha emitido condiciones para aceptar participar en los comicios, como el respeto a los resultados anteriores y la liberación de presos políticos.
En resumen, el cambio de fecha de las elecciones regionales y parlamentarias en Venezuela ha generado controversia y críticas hacia el CNE por la falta de transparencia y la aparente arbitrariedad en sus decisiones. Los expertos y actores políticos continúan evaluando el panorama electoral en medio de un ambiente de incertidumbre.