El presidente de Guyana, Mohamed Irfaan Ali, ha calificado como «ridículo» que Venezuela haya iniciado una investigación penal sobre los incidentes que tuvieron lugar en la frontera entre ambos países, donde seis soldados guyaneses resultaron heridos. Durante la 48ª cumbre anual de la Comunidad del Caribe (Caricom) celebrada en Barbados, Ali expresó su descontento por las acusaciones hacia Guyana y destacó la postura pacífica y responsable de su país en el conflicto.
Ali ha manifestado su espera por un informe detallado de la Fuerza de Defensa de Guyana (GDF) sobre lo sucedido en la frontera. Además, resaltó el firme apoyo de Caricom a Guyana en defensa de su integridad territorial y soberanía, así como en el proceso que se lleva a cabo en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) respecto al conflicto territorial con Venezuela.
Por otro lado, el Ministerio Público de Venezuela anunció la apertura de una investigación penal sobre los incidentes fronterizos, en los que Guyana denunció un ataque a seis de sus soldados. Se nombraron fiscales especializados para llevar a cabo la investigación y se tomarán declaraciones a las personas heridas en el suceso, quienes están recibiendo atención médica por parte de las autoridades venezolanas.
El jefe del Ejército de Guyana, Omar Khan, informó que dos de los soldados heridos se encuentran en estado crítico. Venezuela, por su parte, ha indicado que los hechos podrían estar relacionados con elementos vinculados a la minería ilegal en la región de Guayana Esequiba, territorio en disputa entre ambos países.
Este incidente ocurre en medio de la controversia territorial por el Esequibo, un área de aproximadamente 160,000 kilómetros cuadrados reclamada por ambas naciones. Venezuela ha señalado la importancia estratégica de esta región y anunció la elección de una autoridad venezolana en el territorio en disputa, lo que ha sido considerado como una violación al Acuerdo de Argyle firmado en 2023 para evitar conflictos en la zona.
La tensión entre Guyana y Venezuela continúa en aumento mientras ambos países buscan resolver sus diferencias territoriales. La comunidad internacional sigue de cerca este conflicto, que amenaza con escalar si no se alcanza una solución diplomática.