Rusia, Ucrania y Estados Unidos acuerdan garantizar una navegación segura en el mar Negro
En una reunión celebrada en Riad (Arabia Saudí), representantes de Rusia, Ucrania y Estados Unidos acordaron garantizar una navegación segura en el mar Negro. Esta medida busca eliminar el uso de la fuerza y evitar que buques comerciales sean utilizados con fines militares en la región.
Estados Unidos emitió dos comunicados separados sobre las conversaciones mantenidas con Rusia y Ucrania, destacando la importancia de este acuerdo para promover la paz y la seguridad en la región. Además de la navegación segura, se acordó desarrollar medidas para prohibir los ataques contra las instalaciones energéticas de ambos países.
En cuanto a Rusia, Estados Unidos se comprometió a ayudar a restablecer su acceso al mercado mundial de exportaciones agrícolas y de fertilizantes, facilitando su acceso a puertos y sistemas de pago para estas transacciones. Por su parte, sobre Ucrania, la Administración de Donald Trump se comprometió a colaborar en el intercambio de prisioneros de guerra, la liberación de civiles y el regreso de niños ucranianos transferidos a la fuerza.
La necesidad de cesar las matanzas fue reiterada por el Ejecutivo estadounidense como un paso fundamental para lograr una paz duradera en la región. Estados Unidos se comprometió a seguir facilitando las negociaciones entre Rusia y Ucrania para alcanzar una solución pacífica, de acuerdo con los acuerdos alcanzados en Riad.
Rusia, por su parte, demandó a Ucrania claras garantías de seguridad para reanudar la aplicación de la Iniciativa del Mar Negro, una tregua marítima firmada en junio de 2022 que permitió la exportación de productos alimentarios desde puertos ucranianos a pesar del conflicto en la región.
Este acuerdo representa un paso importante hacia la estabilidad en el mar Negro y en la región en general. La cooperación entre Rusia, Ucrania y Estados Unidos es fundamental para garantizar la seguridad y el desarrollo económico en esta zona estratégica.
En resumen, la garantía de una navegación segura, la prohibición de ataques contra instalaciones energéticas y el compromiso de promover la paz son elementos clave de este acuerdo trilateral. La comunidad internacional espera que estas medidas contribuyan a la estabilidad y la prosperidad en el mar Negro y en la región en su conjunto.