La situación entre Israel e Irán continúa escalando en medio de un conflicto que ha dejado cientos de víctimas y ha generado amenazas directas entre ambos países.
Tensiones entre Israel e Irán alcanzan niveles críticos tras ataques y amenazas mutuas
El ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, lanzó una advertencia contundente contra el líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, señalando que «este hombre no debe seguir existiendo».
Esta declaración se produjo luego de un ataque con misiles desde Irán que alcanzó un hospital y varios edificios residenciales cerca de Tel Aviv.
Ataques y consecuencias en Israel
El bombardeo iraní dejó al menos 40 personas heridas, según el servicio de rescate israelí Magen David Adom, aunque no se reportaron heridos graves en el hospital afectado, el Centro Médico Soroka en Beersheba.
Este centro, que atiende a más de un millón de personas en el sur de Israel, sufrió daños significativos en un antiguo edificio de cirugía que había sido evacuado previamente. Tras el ataque, el hospital cerró sus puertas a todos los pacientes, excepto aquellos en estado crítico.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, condenó el ataque contra el hospital y prometió represalias contundentes, afirmando que «exigiremos el precio total de los tiranos de Teherán».
Mientras tanto, las defensas aéreas israelíes lograron interceptar la mayoría de los misiles y drones lanzados por Irán, aunque algunos lograron impactar en zonas civiles.
Respuesta israelí: ataques a instalaciones nucleares iraníes
Israel respondió con una ofensiva dirigida contra instalaciones clave del programa nuclear iraní, incluyendo el reactor de agua pesada en Arak.
Según el ejército israelí, los ataques tuvieron como objetivo evitar que estas instalaciones sean utilizadas para producir plutonio destinado a armas nucleares. También se reportaron bombardeos en Natanz y otros sitios relacionados con el enriquecimiento de uranio.
El ejército israelí aseguró que sus acciones buscan prevenir cualquier avance en el programa nuclear iraní.
Por su parte, la televisión estatal iraní negó que hubiera peligro de radiación tras el ataque en Arak y afirmó que las áreas civiles cercanas no sufrieron daños.
Escalada del conflicto y repercusiones internacionales
Hasta ahora, la violencia ha dejado un saldo devastador. Un grupo iraní de derechos humanos con sede en Washington reportó al menos 639 muertos en Irán, incluidos 263 civiles, además de más de 1.300 heridos. En Israel, los ataques han causado al menos 24 muertes y cientos de heridos.
Funcionarios estadounidenses revelaron que el presidente Donald Trump vetó recientemente un plan israelí para asesinar al líder supremo iraní. Trump aseguró que no existen planes inmediatos para tal acción, aunque no descartó futuros movimientos.
En paralelo, Irán ha rechazado los llamados internacionales para detener su programa nuclear, insistiendo en que tiene fines pacíficos. Sin embargo, su enriquecimiento de uranio al 60%, cercano al nivel armamentístico del 90%, sigue siendo motivo de preocupación global.
Perspectivas diplomáticas
A pesar de la escalada militar, existen indicios de posibles esfuerzos diplomáticos. El ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Abbas Araghchi, anunció una reunión en Ginebra con sus homólogos europeos y representantes de la Unión Europea.
No obstante, la situación sigue siendo tensa, especialmente tras las advertencias iraníes sobre «graves consecuencias» si Estados Unidos intensifica su participación en el conflicto.
