El gobernador de Texas, Greg Abbott, ha anunciado con orgullo que ha expulsado a más de 60.000 migrantes a otros estados, específicamente a ciudades con alcaldes demócratas. Abbott hizo este anuncio a través de su cuenta de Twitter, donde también detalló el número de personas que fueron enviadas a ciudades como Nueva York y Washington D.C.
Según Abbott, Nueva York es la ciudad que ha recibido la mayor cantidad de migrantes, con un total de 22.600. Le sigue de cerca Chicago, con 18.000, y Washington D.C., con 12.500. Además, Abbott también transportó migrantes a Denver (5.700), Filadelfia (3.200) y Los Ángeles (1.100). En total, aproximadamente 63.100 personas han sido expulsadas de Texas y llevadas a otros estados del país.
Es importante mencionar que muchos de estos migrantes terminan viajando a Nueva York desde estas otras ciudades debido a la posibilidad de recibir alojamiento gratuito. Desde el año pasado, la ciudad de Nueva York ha experimentado una crisis migratoria y ha comenzado a ofrecer boletos de avión gratuitos a otros destinos de Estados Unidos para aquellos que deseen abandonar la ciudad voluntariamente. Esta medida es un intento desesperado por descongestionar la urbe, ya que desde la primavera de 2022 han llegado a la Gran Manzana alrededor de 133.400 personas, según las cifras municipales.
Abbott atribuye la llegada masiva de migrantes indocumentados a la frontera sur del país a la “política de fronteras abiertas” del presidente Joe Biden. Ha asegurado que Texas continuará utilizando todos los recursos a su disposición para proteger a las poblaciones fronterizas del estado. El traslado de migrantes ha tenido un costo estimado de 75,5 millones de dólares para el estado de Texas y es parte de la Operación Estrella Solitaria, que se inició en 2021 e incluye el despliegue de la Guardia Nacional de Texas para contener la inmigración indocumentada.
Con información de Efecto Cocuyo