Los habitantes del sector La Vega, en el municipio Díaz, han alzado su voz para denunciar una problemática que ha generado gran preocupación en las últimas semanas: los piques ilegales de motos que se llevan a cabo en la calle sur, ubicada detrás del cementerio de San Juan Bautista.
Esta práctica, que ha ido en aumento durante las últimas tres semanas, representa un grave riesgo para la seguridad de los vecinos y sus familias.
De acuerdo con los testimonios de los residentes afectados, a partir de las 4:30 de la tarde, esta vía se transforma en un circuito clandestino donde grupos de motorizados realizan maniobras peligrosas y motopiruetas.
Estas actividades no solo ponen en peligro la vida de los peatones que transitan por el lugar, sino que también afectan especialmente a los niños, quienes suelen jugar o caminar por la zona.
La calle en cuestión es una vía clave que conecta el sector La Vega con Punta Cuji y es utilizada diariamente por decenas de personas.
Además del evidente riesgo para la seguridad vial, los piques ilegales generan contaminación acústica y molestias constantes para los vecinos, quienes ya no se sienten seguros en su propia comunidad.
Ante esta alarmante situación, los residentes de La Vega han hecho un llamado urgente a la Alcaldía de Díaz y a las autoridades competentes para que actúen de manera inmediata.
Entre las medidas solicitadas, destacan una mayor presencia policial en el área, la instalación de señalización vial adecuada y reductores de velocidad que puedan disuadir a los infractores.
Los vecinos insisten en que es fundamental tomar acciones concretas para garantizar la seguridad de todos los habitantes del sector.
“No podemos seguir viviendo con este temor constante. Necesitamos que las autoridades nos respalden y pongan fin a este problema antes de que ocurra una tragedia”, expresó uno de los residentes.