El Papa Francisco criticó en su última misa en honor a la Virgen de Guadalupe el uso ideológico que se ha hecho de esta figura religiosa. Durante la ceremonia en la basílica de San Pedro, el Pontífice lamentó que distintas corrientes hayan intentado aprovechar el misterio guadalupano con fines ideológicos.
El Sumo Pontífice destacó la figura de la Virgen de Guadalupe como madre, haciendo especial hincapié en la ternura con la que se dirige al indio Juan Diego. Francisco resaltó la importancia de la maternidad de María en este contexto y subrayó la sencillez de la tilma y la belleza de las rosas como elementos que simbolizan esta devoción.
En sus palabras, el Papa enfatizó que el misterio guadalupano debe ser venerado y no utilizado para promover ideologías. Afirmó que la esencia de este culto reside en la maternidad de María y en el consuelo que brinda a sus hijos. Para Francisco, la Virgen de Guadalupe representa una fuente de fe y fortaleza en los momentos difíciles de la vida.
La ceremonia en honor a la Virgen de Guadalupe se llevó a cabo en la basílica de San Pedro del Vaticano, con lecturas y cánticos en español. Esta tradicional misa, que se celebra cada 12 de diciembre, reunió a fieles que acudieron a rendir homenaje a la patrona de México y de las Américas.
En un contexto donde la fe y la devoción religiosa cobran especial relevancia, el Papa Francisco reiteró su llamado a preservar la pureza del misterio guadalupano y a no desvirtuar su significado con propósitos ajenos a la espiritualidad. Una vez más, el Pontífice destacó la importancia de honrar a la Virgen de Guadalupe como símbolo de amor maternal y protección divina.