El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha establecido contacto con Nicolás Maduro para implementar un plan de acción destinado a eliminar a los grupos armados en la frontera con Venezuela. Esto surge como respuesta a los enfrentamientos en la región del Catatumbo entre la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y una facción disidente de las FARC.
En sus declaraciones, Petro mencionó que ha dialogado con Maduro para cerrar los pasos ilegales en el río Catatumbo y coordinar acciones a través de vuelos en ambos lados de la frontera. Además, destacó la presencia de 1.580 connacionales en campamentos de refugiados en territorio venezolano.
Asimismo, se está desarrollando un plan de acción conjunto para neutralizar la presencia de los grupos del narcotráfico en la frontera, con el objetivo de cerrar sus operaciones en la región.
En respuesta a las críticas recibidas por su viaje oficial a Haití, Petro afirmó que se mantuvo conectado con el gobierno venezolano durante su estadía en ese país. Delegó a su ministro de Defensa para entablar conversaciones con su homólogo venezolano y establecer un plan conjunto para combatir las bandas armadas en la frontera.
El canciller colombiano, Luis Gilberto Murillo, quien renunciará a su cargo a finales de enero, informó que Colombia ha solicitado a Venezuela fortalecer el control en la frontera para evitar la entrada de combatientes del ELN desde el Catatumbo. Ambos gobiernos han estado coordinados para garantizar la seguridad en la región fronteriza.
Colombia y Venezuela comparten una frontera de 2.219 kilómetros, con aproximadamente 375 kilómetros localizados en la región del Catatumbo, donde se han registrado enfrentamientos entre el ELN y las disidencias de las FARC por el control territorial y de actividades relacionadas con el narcotráfico.