Seis ciudadanos estadounidenses detenidos en Venezuela fueron puestos en libertad el viernes después de la visita del enviado especial del presidente Donald Trump, Richard Grenell, a Caracas. El Fiscal General Tarek William Saab declaró que estos ciudadanos fueron tratados de manera digna durante su detención, según una entrevista con el canal estatal VTV.
Durante las conversaciones con la delegación enviada por Trump, se revisaron las medidas tomadas con respecto a los seis ciudadanos estadounidenses, quienes recibieron un trato adecuado. Saab señaló que la visita de Grenell implica un reconocimiento del presidente Nicolás Maduro, a pesar de las declaraciones de Washington reiterando que no lo reconocen como mandatario.
Los seis ciudadanos estadounidenses regresaron a su país en un avión junto a Grenell, quien se reunió con Maduro durante su visita oficial a Caracas. Posteriormente, Grenell informó a través de las redes sociales sobre las liberaciones, celebradas por Trump.
En el Palacio de Miraflores, Maduro y Grenell abordaron temas como la situación de ciudadanos estadounidenses involucrados en delitos en Venezuela, la migración y el impacto de las sanciones económicas. Caracas expresó su disposición a mantener canales diplomáticos abiertos con EE.UU. y planteó la construcción de una nueva agenda para las relaciones bilaterales.
Por otro lado, Trump anunció que no permitirá la compra de petróleo a Venezuela, en contraste con la política de su antecesor, Joe Biden. Este alivió las sanciones permitiendo a empresas extranjeras, incluida Chevron, operar en Venezuela, que posee grandes reservas de crudo.
En medio de estos acontecimientos, se ha planteado la posibilidad de un nuevo comienzo en las relaciones entre Estados Unidos y Venezuela, marcando un cambio significativo en la dinámica diplomática entre ambos países.